Imagina andar buscando un polvo fijo, literalmente follar lo que sea y a quien sea, pero cuidado con lo que deseas, porque a veces, una mujer puede ser buena, pero si no has probado un hombre, no podrás decir que has experimentado todo...
Pensar que esto se resume en ver una figura femenina en un cuerpo masculino, pero al verla en esa sexy lencería roja, no hace nada más que mojarte y querer follartela duro en el hotel.
Solo diremos, no se lo digas a nadie...